ARTIMAÑAS DEL EMPRESARIO Y COMPETITIVIDAD (IV)

CIRCULAR CENSURADA

AHORA RESULTA QUE LIBERBANK ES MUY COMPETITIVO

Como ya sabemos existen varias formas de hacer sindicalismo, unas heredadas del pasado (sindicalismo de denuncia pública, de denuncia interna, de judicialización, de defensa individual, etc.). También existen otras formas menos confesables (sindicalismo contra los trabajadores, con nocturnidad, sin explicaciones, etc.) que no nos resultan desconocidas en esta empresa. Creemos que cualquiera de ellas es respetable (el de ir contra los trabajadores, no) pero nos damos cuenta de que quienes hemos apostado por la mejor defensa de los trabajadores deberíamos aportar algo más a esa denuncia: el sindicalismo de datos, variedad del sindicalismo de denuncia pública con el que CSICA se ha comprometido ya. Esto significa apelar a las fuentes buscando datos a menudo esparcidos por distintos informes, memorias u organismos públicos que, sólo cuando se juntan dejan de ser mera información para convertirse en conocimiento y aportar así dos cuestiones esenciales al debate sindical: objetividad y transparencia.

La objetividad es una cualidad reseñable porque es lo que proporciona credibilidad a las denuncias, en cualquier medio que éstas se hagan: internas, públicas, judiciales, etc. y la transparencia es determinante para desenmascarar a aquellos que retuercen la realidad con el ánimo de adecuarla a sus pretensiones, no siempre confesables.

Después de haber desmontado y denunciado públicamente las artimañas del empresario Liberbank (que no aplica los últimos datos financieros conocidos porque le vienen mal para su pretensión de recortes), seguimos haciendo acopio de datos en nuestra tarea de desmontar ante la opinión pública, y ante el Juez, que Liberbank obró de mala fe, que utilizó los datos coyunturales de diciembre de 2012 (ejercicio que cerró con pérdidas todo el sector por el saneamiento impuesto por el Gobierno) para tomar una decisión temeraria contra los trabajadores, a sabiendas de que los indicadores del primer semestre habían mejorado sensiblemente frente a los utilizados, más antiguos.

Afrontamos ahora la tarea de comprobar los argumentos reiterados en sus comunicaciones, memorias e informes en materia de competitividad, es decir, en la capacidad de competir con nuestros rivales en este nuevo sistema financiero español.

Ya hemos visto como han evolucionado las principales magnitudes de Liberbank en el tiempo y ahora haremos lo propio con los datos comparados con el sector de su competencia, fundamentalmente el sector cajas de ahorros reconvertidas en Bancos.

El empresario dijo en la comunicación del ERTE (10/7): “…..permitirá alcanzar los ratios de eficiencia que le permitan ser competitiva, ajustar su capacidad productiva y la reducción del coste unitario, permitirán el cumplimiento del Plan de Reestructuración y la viabilidad futura de la Entidad.”

En la Memoria (pag. 57) entregada a la representación laboral para justificar el atropello se decía: “el ratio de eficiencia es un indicador clave ya que una estricta contención y racionalización de los costes es clave para la consecución de objetivos de las entidades”.

El Informe aportado también en las conversaciones previas al atropello y elaborado por Forest Partners decía en su pag. 78: “El plan de reestructuración de Liberbank, propone una serie de medidas, necesarias para alcanzar los ratios de eficiencia que le permitan ser competitiva, para ajustar la capacidad productiva y el coste unitario hasta que se produzca una recuperación del negocio en los años venideros.”

Parece, pues, que todo el mundo cree que la eficiencia es la clave de bóveda de la sostenibilidad de Liberbank. Entendemos por ratio de eficiencia la cantidad de gastos de administración (incluido coste salarial) que cuesta producir 100 euros de valor añadido (Margen Bruto). Vamos a ver los valores de Liberbank en esta comparativa con el sector y si éstos le “permiten ser competitivo”.

Hemos utilizado en la comparativa los datos de aquellos Bancos procedentes de Cajas que es previsible que vayan a ser nuestra competencia en un futuro próximo. Hemos descartado los Bancos, ya sean o no propiedad del FROB, que sabemos van a ser vendidos o absorbidos por terceros. 

Como ya sabemos la ratio de eficiencia, en la medida que se trata de costes de producción, es mejor cuanto más baja. Resulta bastante evidente que por la vía de la eficiencia no es verdad que resulte previsible que vayamos a dejar de ser competitivos. Debe añadirse que estos datos se corresponden con el primer semestre del ejercicio 2013 y que, por tanto, se han calculado sin los recortes del atropello de Menéndez. ¿De verdad alguien cree que con la relevancia que todo el mundo le ha dado a esta ratio, y a la vista de la comparativa, Liberbank es un Banco ineficiente? Obviamente estamos ante una gran y burda falacia, repetida hasta la saciedad con datos de diciembre pasado que ahora se vuelve contra quien lo dijo, propios y extraños.

La realidad y los números son tozudos y está claro que la eficiencia de Liberbank se sitúa sólo por detrás de otros dos competidores (uno de ellos porque ha vendido buena parte de su red de Oficinas) y tiene detrás a los grandes bancos de Cajas (aunque en honor a la verdad la Caixa por razones de absorción de Banca Cívica también). Seguiremos hablando de números en un próximo comunicado. Seguiremos haciendo sindicalismo de datos.

PD. La eficiencia del sector Bancos publicada por AEB es del 49,43%, ligeramente peor que Liberbank, y no hemos visto que se hayan liado a mandar a gente para su casa.