viernes, 31 de julio de 2015

SENTENCIA TRIBUNAL SUPREMO



Hemos ganado al empresario en el Tribunal Supremo



Tras una atenta lectura de la Sentencia de la Sala Cuarta del TS que resuelve un recurso de casación del empresario, presentado contra la Sentencia de la Audiencia Nacional de 14 de noviembre de 2013 en relación con el ERTE firmado por CCOO y UGT con la empresa en el SIMA el día 25 de junio de 2013, tenemos que decir lo siguiente:

Primero.- La cuestión central y fundamental de esta Sentencia está contenida en el FALLO:

1) Desestimamos el recurso de casación interpuesto por la representación letrada de LIBERBANK, S.A. y el BANCO CASTILLA-LA MANCHA, S.A., contra la sentencia de la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional, de 14 de noviembre de 2013, en autos nº 320/2013.
2) Confirmamos la sentencia 193/2013, de 14 de noviembre, dictada por la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional,

Segundo.- El empresario, se ha precipitado en la prensa y en la Intranet con una interpretación que, desde luego, no se corresponde con el fallo del Alto Tribunal ni con la sentencia de la AN que anuló totalmente las medidas del ERTE de Junio de 2013.

Tercero.- Queremos recomendar a los trabajadores y trabajadoras de LIBERBANK que no caigan en debates bizantinos sobre exégesis procesales, porque lo esencial es lo ya dicho: que la Sentencia que declaró nulo el acuerdo del SIMA ha sido confirmada por el TS en SU TOTALIDAD, habida cuenta de que si el Alto Tribunal hubiera querido modificar total o parcialmente dicha Sentencia ha podido hacerlo y no lo ha hecho.

Cuarto.- Y dicho esto, queremos deciros que la posición de CSICA, de la mano en todo momento de sus asesores jurídicos, es de recomendar mantener la calma, no dejándose “contaminar” por las filtraciones del empresario a la prensa, que muestran más lo que le gustaría que hubiera pasado que lo que pasó realmente. Esperamos tranquilos y confiados la segunda sentencia, esta vez sobre el ERE de diciembre de 2013, para posteriormente activar las ejecuciones individuales ante el empresario para que nos devuelvan lo que es nuestro.

Hemos ganado al empresario. Esta es la única realidad.


lunes, 27 de julio de 2015

ANÁLISIS DE COMPETITIVIDAD (II)


Los recortes que sirvieron para todo


Flaco favor haríamos a toda la plantilla si no entráramos a analizar lo que pudo haber sido el ERTE y no fue. Sustancialmente en la mesa de negociación de lo que se habló (antes de las reuniones a escondidas) fue de la postura a adoptar ante las causas económicas aducidas por la empresa (siempre referidas a dic-2012, año de pérdidas por afloramiento del ladrillo), y si las medidas a tomar deberían ser  de carácter conyuntural (reducción de jornada y otros) o medidas estructurales (salidas programadas, pactadas y negociadas de unos 600 trabajadores).

Allí se dijeron algunas cosas peregrinas, como que era la UE quien les había impuesto esas condiciones, lo cual tuvimos ocasión de comprobar más tarde que no se correspondía con la verdad ya que fue LBK quien las propuso. Inicialmente todos los sindicatos estábamos de acuerdo en que dichas medidas debían ser estructurales, pero sólo CSICA sostuvo esta argumentación con datos, con los datos oficiales ya disponibles a Setiembre de 2013.  En la Audiencia Nacional, unos meses después, el empresario y los sindicatos firmantes consagraron los recortes salvajes cómo único camino a la salvación, aunque para ello tuvieran que referirse insistentemente al cierre de 2012 cuando ya estaba avanzado el año 2014.

Hoy estamos en condiciones de comprobar cómo se hubiera comportado la competitividad comparada en el supuesto de que LBK hubiera implantado medidas estructurales, al igual que hicieron la TOTALIDAD de nuestros competidores financieros.

Resulta hoy, desde la perspectiva del tiempo, ridícula y esperpéntica la puesta en escena del empresario, que en lugar de entregar los datos para que los sindicatos calcularan el impacto económico de sus propuestas, jugaban a que unos dijéramos un porcentaje de reducción y ellos contestaran si les parecían bien los “ahorros” de nuestra propuesta, como si de una subasta macabra se tratara. Que nadie piense en una negociación en igualdad de condiciones, propuestas cuantificadas, etc. Eso no existió. Y así salió ello.

Los recortes que se firmaron en el ERTE de Dic-2013 ascienden a unos 90 millones de euros por año, pero si las medidas estructurales propuestas (salidas incentivadas, negociadas y pactadas) hubieran sido la alternativa de elección, el “ahorro” en gastos de personal hubiera ascendido a unos 50 millones de €/año.

¿Y qué repercusión hubiera tenido ello para la competitividad de LBK?. Pues iremos desgranando en sucesivos comunicados cómo habría afectado a las distintas ratios. La eficiencia de la que os hablamos en el comunicado anterior se habría visto incrementada en 4 puntos porcentuales, situándose prácticamente en la media del sector, por debajo de CAIXABANK, IBERCAJA o KUTXABANK en cuanto a nuestro sector de referencia, muy por debajo también de la media de los Bancos de la AEB, y al mismo nivel que el BBVA, banco del que no se puede decir que esté mal gestionado precisamente.

A cambio, este empresario hubiera fraguado unas relaciones laborales serias, la paz social estaría garantizada, no andaría jugando a la ruleta rusa en el Tribunal Supremo corriendo el riesgo de quedarse sin “ahorros”, y tampoco habría arrastrado la imagen del Banco por juzgados, dependencias oficiales y medios de comunicación. Todo eso a cambio de 40 millones € en los años 2014 y 2015, para finalmente terminar ofertando esas mismas medidas estructurales unos meses después.

La explicación es que la rebaja en la partida de gastos de personal ha debido servir para muchas otras cosas, además de para defender la competitividad de LBK. También ha servido para dividir a la plantilla en dos grandes grupos a base de implantar esas medidas de forma asimétrica. Asimismo también ha servido para sacar un dinerito con qué retribuir a los accionistas y clientes  engañados por preferentes, y de modo muy especial a enjuagar las carencias de gestión que permiten a otros competidores lograr mejores rentabilidades jugando en el mismo mercado, como podemos ver en los gráficos adjuntos. Para todos esto, amigas y amigos, ha servido nuestro dinero estos 2 años.

Veamos el dato comparado de la productividad que sacan nuestros directivos al negocio que gestionan. Lo vamos a comprobar en forma de margen de intereses sobre el negocio (débitos de la clientela + créditos a la clientela) y de margen bruto sobre el negocio. Es muy fácil deducir que estamos prácticamente los últimos en estas ratios.
                                                                    



Resulta obvio que si la rentabilidad del negocio gestionado se situara sólo en la media de nuestros competidores no habrían sido necesarios recortes de salario salvajes. Y es que cuando el campo, la pelota, los espectadores y el árbitro son los mismos y gana siempre el otro, pues verde y con asas, un botijo.

martes, 21 de julio de 2015

EL TIEMPO NOS DA LA RAZÓN


Las medidas del ERTE fueron el doble de las necesarias


En CSICA ya hace mucho que apostamos por el sindicalismo de datos. Sabemos que no estamos haciendo sindicalismo en un sector de analfabetos, que los trabajadores de LBK comprenden estos datos sin necesidad de que nadie se los interprete. Hoy, para no perder forma en el verano, vamos a seguir entregando información que es de mucho interés para despejar las dudas que alguno pudiera tener aún sobre la oportunidad de las medidas pactadas por el empresario y algunos comparsas sindicalistas cuando nos laminaron el salario y el bienestar de nuestras familias.

Dos han sido, sucesivamente, las falacias que el empresario ha puesto en marcha para defender el ERTE que se está jugando en el Tribunal Supremo, y dos han sido también las disculpas de mal pagador que los sindicatos firmantes han repetido, como loros que dicen lo que saben pero no saben lo que dicen: la primera de ellas que el ERTE, tal y como se firmó, era imprescindible para garantizar la permanencia de la empresa y su competitividad. Y la segunda, que LBK es hoy competitivo en el sector gracias a la adopción de medidas tan duras.

Hemos debido esperar unos meses para conocer las datos oficiales de cierre de 2014 (primer año de dolor) de las cajas de ahorros reconvertidas en Bancos y estamos ya en disposición de combatir estas falacias del empresario y sus sindicatos de guardia porque, como es sabido, la mentira tiene las patas muy, muy cortas.

Hemos elaborado un informe sobre los principales aspectos de la competitividad de LBK y su evolución en estos años, y sobre todo hemos elaborado estas ratios comparadas con nuestro grupo de control, competidores del sistema financiero procedentes de Cajas de ahorros, grandes, medianos y pequeños, de titularidad pública y privada, suficientemente representativos del sector. Este Informe lo publicaremos en nuestro blog (http://csicaliberbank.blogspot.com.es) pero hemos pensado en ir haciendo entregas parciales previas mediante comunicados con los datos financieros que más interés tienen para los trabajadores, especialmente en este momento donde un colectivo importante anda expectante con un empresario que ofrece bajas de confesionario, de uno en uno.

Vamos a comenzar por la evolución de la eficiencia, que como sabéis son los gastos de administración necesarios para producir 100€ de Margen Bruto. Tradicionalmente esta ratio se ha situado como óptima en torno al 50%, es decir, gastar 50€ para ganar 100€. No está mal.

De esta partida de gastos, dos terceras partes aproximadamente son los gastos de personal, peso muy importante en ese concepto de eficiencia que se revela, a su vez, como la clave de bóveda de un concepto muy manido, la competitividad, concepto indeterminado tras el que han escondido sus verdaderas pretensiones, que no eran otras que escudarse tras unas causas económicas propias de la crisis para rebajar la factura del gasto salarial de forma salvaje y desproporcionada, y también de una legislación laboral de 2012 que les permitía hacerlo.

Os dejamos en esta primera entrega datos que son absolutamente relevantes. La eficiencia de LBK se ha visto reducida en tan sólo 4 años en más de 13 puntos porcentuales (-23,5%, esta ratio es de gasto, así que cuanto menor mejor). En ese mismo periodo la eficiencia de la comparativa del sector mejoró tan sólo un 11%, o lo que es lo mismo menos de la mitad que LBK, lo que sirvió a ésta para ponerse de forma repentina (ver gráfico) por encima de los valores medios de los demás competidores.

En la mesa de negociación ya explicamos que no era razonable proponer que un Banco recién nacido aspirara a ser campeón del mundo mundial en eficiencia (con cargo al bolsillo de los trabajadores). Resultaba mucho más racional hacer lo mismo que hacían todos nuestros competidores, pactar con los sindicatos salidas negociadas en forma de prejubilaciones y bajas incentivadas que de forma gradual iban a hacer descender estructuralmente la ratio de eficiencia, de la misma forma en que lo han hecho nuestros competidores, especialmente los de propiedad pública (BANKIA y BMN), que han gestionado la salida del segmento de plantilla más antiguo y también más caro, sin tocar al resto de la plantilla.


Pero LBK tenía prisa. En Diciembre de 2013 ya conocía que iba a tener accionistas y necesitaba recursos para pagarlos. ¿Y qué mejor sitio para buscar que el bolsillo de los trabajadores?







jueves, 16 de julio de 2015

DISCRIMINACIÓN ENTRE LA PLANTILLA

2º ERE: LA EMPRESA HA ANUNCIADO QUE ABONARÁ LA PARTE DE RETRIBUCIÓN FIJA CONVERTIDA EN VARIABLE CORRESPONDIENTE A 2014     



Como consecuencia del Acuerdo Laboral alcanzado en diciembre de 2013 entre la empresa, CCOO, UGT, y CSIF (recurrido en el Tribunal Supremo por CSICA), la empresa convirtió para el personal directivo una parte de su retribución fija en variable en función de una escala progresiva, (oscilando entre el 2,14% y el 8,55%), que se percibiría en función de ciertas condiciones.

En función de ello, RRHH ha anunciado recientemente a los afectados el abono de dicha “retribución variable”, tras la devolución de los 124 millones de € al FROB (cocos) y dado el buen ratio de capital que presenta Liberbank.

En CSICA nos alegramos sinceramente de ello, porque en la Mesa de negociación nos opusimos rotundamente a que parte de la retribución fija de un importante número de trabajadores pasase a tener la consideración de  “salario variable”, porque semejante concesión a la patronal no era de recibo en modo alguno.

Pero por otra parte, no tenemos más remedio que recordar que 1.250 trabajadores de Liberbank están con una reducción de jornada/salario del 30% sin posibilidad alguna de recuperar ni un céntimo de dicha detracción salarial, lo que entraña que la desigualdad y la discriminación oscilen en función de los caprichos alcanzados por los “firmantes”.

Por todo ello, ya suficientemente contado, CSICA no firmó el lamentable acuerdo laboral de diciembre 2013 impugnándolo seguidamente ante la Audiencia Nacional, cuya sentencia de mayo/2014 ha sido revisada hoy por la Sala de lo Social del Tribunal Supremo junto a la sentencia de noviembre/2013.

Esperamos que el Supremo ponga las cosas en su sitio y enmiende la plana a la patronal de Liberbank, que tanta injusticia, angustias, e iniquidad lleva provocando en los trabajadores y en nuestras familias.


Seguiremos informando…

martes, 14 de julio de 2015

PROLONGACIÓN DE JORNADA

EL CAMBIO DEL PARQUE INFORMÁTICO CONLLEVA PROLONGACIONES DE JORNADA DE MÁS DE 5 HORAS

SI LA EMPRESA NO LAS COMPENSA, CSICA LO DENUNCIARÁ A LA INSPECCIÓN DE TRABAJO

En plena canícula extremeña donde el mercurio sobrepasa los 40º C día sí y al otro también, se está acometiendo el cambio de los equipos informáticos en las oficinas seleccionadas, tal y como en su día anunció la empresa. Entendemos que estas prolongaciones se están dando también en el resto de los territorios.

Ya hemos indicado que es lícito que la empresa lleve a cabo estos cambios y no tenemos nada que objetar sobre ello. Ahora bien, CSICA tras girar visitas a las oficinas de Cáceres capital, ha tenido conocimiento por boca de los compañeros afectados que el cambio informático está suponiendo prolongaciones de jornada de más de 5 horas, pues los técnicos llegan a las oficinas sobre las 17,00 horas, y terminan sobre las 22,00.

No es de recibo que se haya comunicado a los directores de oficina que como tienen “flexibilidad horaria”, les corresponde a ellos comerse el marrón. Al respecto, recordamos que la empresa nos comunicó tras el ERTE a todos los trabajadores el nuevo horario reducido y, por consiguiente, ningún director de oficina tiene horario flexible como ya ha constatado la Inspección de Trabajo al denunciar a un director de zona que le vino con ese cuento al ser pescado in fraganti trabajando por la tarde…

Siguiendo lo dispuesto en la normativa laboral, la empresa tiene la obligación de compensar a los trabajadores afectados de forma dineraria o con descanso, al revestir carácter de horas extraordinarias de tipo estructural, debiendo cotizarlas obviamente a la Seguridad Social.

Al mismo tiempo, CSICA ha conocido que la empresa está “regalando” tablet a los responsables de las oficinas consagrando con ello lo que sistemáticamente se conoce como “teletrabajo”, que es la nueva forma diabólica de esclavitud laboral que nos espera, en el caso de que no pongamos pie en pared, hecho que requiere una negativa contundente por parte de todos.


Con vistas a ello, hemos dirigido un nuevo correo electrónico a Recursos Humanos recordando su obligación al respecto, anunciando de que en caso contrario iniciaremos las acciones oportunas.

martes, 7 de julio de 2015

ERE ENCUBIERTO

CRONIFICANDO LOS RECORTES

  
Si el objetivo que persigue LBK con esta importante reestructuración de plantilla anunciada el día 30 de junio, fuera diáfano, transparente y confesable es seguro que trataría de conocer lo antes posible el número de afectados que se adhieren a este plan de salidas con el fin de reorganizar el servicio en las Oficinas en lugar de esperar a que en setiembre monten la encerrona a cada uno de ellos en un vis a vis, tipo lo tomas o prepárate.

Si el objetivo fuera diáfano, transparente y confesable el empresario hubiera planteado el asunto en una mesa de negociación a los sindicatos, en lugar de evitarles.

Si el objetivo fuera diáfano, transparente y confesable hubieran comunicado en el mismo acto su intención además de las condiciones económicas y de todo tipo que tienen intención de aplicarles a los afectados, con el fin de que lo fueran madurando durante el verano. Pero se les cita para setiembre como a los malos estudiantes.

Si el objetivo fuera diáfano, transparente y confesable habrían debido comunicarlo con lealtad a las partes en lugar de filtrarlo a la prensa, por la que nos hemos debido enterar del coste de la iniciativa, del plazo de amortización, de dónde han sacado el dinero para pagar, y de algo que resulta muy importante: la cronificación de los recortes.

La prensa económica (“El Economista”) ha dicho, suponemos que citando fuentes de Liberbank,

“Con esta propuesta, se prevé que la mayor parte de la reducción de costes obtenida por la aplicación del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) actual -vigente desde enero de 2014- se convierta en estructural.”

La Nueva España, órgano de expresión de Cajastur, ha dicho en términos más vulgares, pero tremendamente claros:

“El propósito de esta medida es lograr unos ahorros anuales de 50 millones en costes laborales, convirtiendo así en crónico el recorte de costes salariales que le está suponiendo de forma transitoria a la entidad el actual expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), con vigencia entre 2014 y el verano de 2017.”

Es fácil deducir de ambas crónicas que el propósito de LBK es el mismo que consiguió con el ERTE actualmente en vigor, reducir el coste salarial, de manera que si el objetivo es el mismo, las causas que lo justifican han de ser las mismas, causas económicas.

A pesar de esa falta de transparencia suponemos que el propósito será seguir poniendo a la niña “guapa” para los cortejadores que la preferirán más delgada. Y es que es sabido que, además de las bicicletas, también las dietas “adelgazantes” son para el verano.  Se anuncia la medida pero no se publican las condiciones, siempre con esta política de “buena fe” que caracteriza a los dirigentes de este Banco. A algún ideólogo le habrá parecido divertido dejar cocerse a los potenciales afectados en su propio jugo de la rumorología mientras se adentran en un proceso psicológico de aceptación para que lleguen a setiembre “tiernos” para la negociación individual.

Y es que, aunque oculto casi todo de esta nueva maniobra, LBK sí se ha encargado de dejar claro que los sindicatos no van a intervenir en esta historia. Niega con ello las funciones constitucionales de los sindicatos, la defensa y representación especializada de los trabajadores. Prefiere la encerrona, la presión, la triquiñuela individual de la extinción por mutuo acuerdo, que sólo podría llamarse así cuando las partes del contrato de trabajo mantuvieran posturas de equilibrio. Pero esto no es así. El contrato de trabajo es un contrato tan especial que ha dado lugar a toda una rama del derecho, el derecho del trabajo, que tiene como función esencial la corrección de las enormes asimetrías que se producen cuando una de las partes contratantes tiene la prerrogativa de mandar sobre la otra.

Por eso existen en los Estados “sociales y de derecho” democráticos las organizaciones sindicales. Para evitar que el patrón siga explotando, engañando y sirviéndose indiscriminadamente del trabajador. Poco importa si en la literalidad de la norma sustantiva no se estipula el procedimiento de reestructuración colectiva de la plantilla que extingue su relación por mutuo acuerdo. E importa poco porque lo que se está vulnerando es algo que escapa, incluso al ordenamiento positivo, residenciándose en la Constitución: el derecho que tienen los trabajadores a que sus intereses sean defendidos por sus representantes con sus asesorías jurídicas detrás, con sus garantías sindicales intactas.

Pero el empresario LBK prefiere ir uno a uno, como en las repúblicas bananeras, buscando explotar la debilidad, la ignorancia en materia laboral o fiscal, el miedo a las repercusiones y el qué me pasará si no acepto.

Por eso ha salido el último día de junio a decir que va a hacer otro ERE que “cronifique los recortes” y que los sindicatos no van a tener ocasión de defender los intereses de sus compañeros, aunque ello suponga vulnerar el derecho fundamental a la libertad sindical o a la negociación colectiva.

No debe olvidarse el empresario que una extinción colectiva de la relación laboral tiene tal consideración sin perjuicio de la forma de llamarlo, e incluso del procedimiento utilizado para acometerlo. Si se quiere desprender del 12 por ciento de la plantilla por causas económicas (la cronificación ya dicha) da igual el procedimiento que haya elegido, estaremos ante una extinción colectiva por causas económicas, un ERE encubierto al que no se quiere llamar así, buscando la indefensión de los trabajadores afectados.

En CSICA estamos totalmente a favor de facilitar una salida organizada, legal, negociada y consensuada del colectivo citado. Pero no de que el empresario pueda manipular unilateralmente un asunto que afecta a más de 600 trabajadores. Es nuestro deber, y también nuestro derecho, ejercer las acciones asociadas al derecho fundamental a la libertad sindical y a la negociación colectiva.

También es nuestro deber y nuestro derecho hablar en nombre de los que se quedan. Y en este sentido hay una cosa que el empresario debería explicar. Si hay dinero para todo, para pagar al Estado, a los accionistas, a los preferentistas, e incluso a los trabajadores para que se vayan ¿cuál es la explicación para que se siga haciendo ablación de nuestros bolsillos de forma tan salvaje hasta el año 2017?.

Dice el orden civil que las obligaciones que nacen de los acuerdos están para cumplirlas, incluso las intolerables que firmaron algunos sindicatos a escondidas. Pero incluso dichas obligaciones tienen su límite previsto para cuando las condiciones del acuerdo hayan variado de forma tan notoria que permita modificarlas. Se trata del conocido principio rebus sic stantibus aplicable directamente a nuestro ERTE para el que se simularon unas causas, entonces falsas y hoy insostenibles en sus efectos hasta nada menos que Junio de 2017. Los sindicatos firmantes tienen hoy motivos y fundamentos legales para que los tribunales revisen y anulen lo firmado. Si no lo hacen es porque no quieren. Que se sepa.

CSICA estará allí otra vez. Si no puede ser en la mesa de negociación será en los tribunales, defendiendo a esos trabajadores a los que un empresario, hostil hasta el final, ha sembrado de inquietud y de incertidumbre todo el verano.


Mientras tanto os damos algún dato más de la operación "oscura"





miércoles, 1 de julio de 2015

BAJAS VOLUNTARIAS

LIBERBANK ANUNCIA QUE HABRÁ “BAJAS VOLUNTARIAS INCENTIVADAS”, SIN CONCRETAR

PARA CSICA, LA FÓRMULA ELEGIDA ES LA PEOR DE LAS POSIBLES


Lo que era un rumor a voces, se convirtió ayer por la tarde en noticia, al haberse filtrado a la prensa que el consejo de administración de Liberbank ha acordado que se acometa a partir de septiembre, un plan de prejubilaciones para 615 trabajadores:

  • Nacidos en 1956 o antes, con salida el 31-12-2015.
  • Nacidos en 1957, con salida el 31-12-2016.
  • Nacidos en 1958, con salida el 30-06-2017.

Por razones organizativas la empresa podría alterar el orden de salida, y se podrían incorporar otros trabajadores en el caso de que no se cumpla el cupo total.

La prensa ha publicado que este plan, supondrá un coste aproximado para la entidad de unos 111 millones de euros que se financiaría mediante plusvalías por inversiones en renta fija, sin impacto en la cuenta de resultados, estando el asunto ya provisionado en el trimestre cerrado ayer. Ello equivaldría a un coste medio/trabajador de 180.000 €, lo que es paupérrimo si lo comparamos con otros procesos recientemente acometidos en el sector.

Coincidiendo con esta filtración, recibimos una llamada del jefe de Relaciones Laborales anunciándonos la noticia en los mismos términos y de forma muy escueta nos manifestó, sin apenas concreción, que el banco ha decidido acometer este proceso mediante lo que se denomina “bajas voluntarias incentivadas”, a negociar directamente con los afectados, lo que excluiría la intervención directa de los Sindicatos, hecho que es de dudosa legalidad y además no entraña garantías suficientes para los afectados.

 Liberbank, encuadrada dentro de lo se conoce en el argot financiero como los "7 enanitos", está siendo muy presionada tanto por los reguladores como por los inminentes fallos del Tribunal Supremo en el caso de que les sean desfavorables de cara a futuros movimientos de integración, hechos que en opinión de CSICA han impulsado a nuestra patronal a mover ficha de forma inmediata de cara a posicionarse ante los mismos, adoptando, ahora ya sí, medidas de carácter estructural, tal y como CSICA se hartó de reclamar en solitario en su día conocedores de que Liberbank tenía un problema estructural dado el tamaño de su balance.

Conviene hacer memoria y retrotraernos a las últimas Mesas de Negociación Laboral, en las que Liberbank expuso a los Sindicatos que en el Plan de Viabilidad de la entidad expuesto al MOU se contemplaba unas reducción de costes en el equivalente a 666 FTE,s, pero tras la firma de los sucesivos acuerdos laborales por CCOO, UGT, y CSIF (después), dichos ahorros han sido de más del doble, lo que ha supuesto un sacrificio innecesario y salvaje para los trabajadores, si se hubiesen hecho las cosas bien desde un principio. 
  
Estando ahora la fruta madura, (los trabajadores de más edad están desafectados, desmotivados, y hartos de todo), el banco quiere ofrecerles un "plan de prejubilaciones" mediante la figura de lo que se conocen como bajas incentivadas, que en términos jurídicos equivalen a la extinción del contrato por mutuo acuerdo de las partes, de lo que se deriva que no ha lugar a la percepción de desempleo, ni rigen las exenciones fiscales  como en el caso de un despido colectivo pactado en un ERE, al ser los trabajadores los que rompen su relación laboral de forma voluntaria, en cuyo caso no rigen las ventajas expuestas.

Para CSICA, se trata de una nueva maniobra de nuestra avara patronal de cara a que estas desvinculaciones sean las más baratas jamás vistas en el sector y sin las garantías mínimas exigidas, como así apunta el coste anunciado, lo que nos impulsa a realizar las siguientes reflexiones:

1.- Entendemos que el plan propuesto, reviste carácter de un ERE encubierto extintivo de carácter colectivo estando vigente un  ERTE hasta junio 2017, al afectar a más de 600 trabajadores, hecho que analizaremos en detalle con nuestra asesoría jurídica, de cara a la interposición de posibles acciones de carácter colectivo ante la Audiencia Nacional.

2.- Las bajas voluntarias, son "auto despidos" de cada trabajador a negociar de modo individual con la peligrosa dirección de Recursos Humanos de Liberbank,  lo que encierra un riesgo muy grande para los afectados a la vez que posibles abusos y discriminaciones en función del perfil del empleado.

3.- Las “bajas incentivadas voluntarias”,  no otorgan derecho de desempleo ni contemplan exenciones fiscales ante Hacienda (tras la reforma del IRPF ahora están exentos los primeros 180.000 €), en cuyo caso las cantidades ofrecidas por la empresa tributarían  de modo íntegro.

4.- No hay que olvidarse de otros importantes capítulos como es el pago de las cotizaciones sociales a la Seguridad Social (¿por quien?, ¿cómo?, ¿de qué forma?, ¿por cuanto tiempo?); ¿qué pasará con las aportaciones a los planes de empleo?; ¿como salvaguardar y garantizar situaciones imprevistas ante hipotéticos cambios normativos?; ¿qué pasará con los préstamos en vigor?; ¿habrá revisiones de IPC?; ¿cuál será la fórmula de cobro?, y un largo etc.


Como conclusión,  tenemos que manifestar que CSICA valora de modo muy negativo este Plan anunciado, a la espera de que se concreten los términos del mismo, recomendando a los posibles afectados que mantengan la calma hasta tanto en cuanto se conozca su contenido, al tiempo de que nos reservamos el ejercicio de las acciones que correspondan, con el fin de salvaguardar y proteger los legítimos intereses de los trabajadores afectados.