A LIBERBANK NO LE SOBRA PLANTILLA (VII)

CIRCULAR CENSURADA

A Liberbank no le sobra plantilla (VII)

“Aquí cabemos todos o no cabe ni Dios”… (Víctor Manuel)

Seguimos con una nueva entrega del culebrón de este empresario que nos muestra los datos de diciembre mientras nos mete la mano en la cartera. Seguimos aireando unos datos que están guardados bajo siete llaves por alguien que ha querido darnos gato por liebre. Con deciros que los “directivos” de este Banco envían a los sindicatos en Agosto los datos financieros de Marzo (a ver si cuela y no reparamos en los de Junio ¿qué tendrá junio?) a sabiendas de que tan sólo unos pocos días después deben depositarlos en la CNMV (¡maldita transparencia!), lo cual resulta bastante ridículo y absurdo, la verdad.

Hoy vamos a hablar de cuánta plantilla de este Banco sobra. Nos negamos a llamar FTE (dícese full-time equivalent o trabajadores a tiempo completo) a personas de carne y hueso, otro neologismo de un neoliberal, que parece que no se atreve a decir abiertamente que sobran 666 trabajadores con nuestras circunstancias, nuestras necesidades, nuestras familias.

           

En las conclusiones de la famosa Memoria que se nos presenta para justificar la expulsión de 666 trabajadores (que sobran 2 años y la troika firma 4) dice que “Las medidas (se refiere a las firmadas por la troika) buscan un ahorro de costes (naturalmente se refiere a los costes de personal) a través de una reducción de la capacidad y una reducción del coste unitario”.

Sin dulcificaciones de ningún tipo, y excluyendo lo que va en los paréntesis, que es nuestro, el empresario de Liberbank haciendo de la necesidad virtud y aprovechando la infausta reforma laboral, debió pensar: —Tengo una ocasión cojonuda para echar a unos cientos de trabajadores y reducir el salario al resto…

Vamos a ver si es necesario reducir o no la capacidad (personas que desempeñan extraordinariamente su trabajo, como nos dicen los números) de este Banco. Estamos hablando de eso que los técnicos llaman dimensionamiento de plantillas, y que no es otra cosa que poner en relación la plantilla existente con la necesaria. Y vamos a recurrir para ello de nuevo a la comparativa con nuestro conocido grupo de control (Bancos procedentes de la integración de Cajas), rivales en la calle a quienes debemos enfrentar nuestros números para comprobar otro aspecto de la competitividad.

Una ratio resulta determinante para conocer ese dimensionamiento: relacionar el negocio (ya hemos dicho que consideramos negocio el crédito a la clientela + depósitos de la clientela, ambas partidas del Balance) con la plantilla media y luego compararlo con la misma ratio de nuestros rivales.

El negocio que gestiona la plantilla de Liberbank se sitúa exactamente en la mediana (valor intermedio de una lista ordenada de números), por delante de algunos competidores muy ilustres y con fama de bien gestionados (qué suerte).  A la vista de esto queda claro que nadie diría que aquí sobra nadie. Estamos en los números del sector, por tanto esta plantilla está perfectamente alineada con el resto, y eso con números de Junio de 2013. Sin aplicar barbaridades ni sinsentidos.

Sólo deciros que si estás cifras se hubieran calculado con 666 trabajadores menos (los que han enviado al paro a expensas de lo que diga el Juez al que le vamos a contar todo esto y con detalle), la cifra de negocio se hubiera elevado de una forma tan importante que nos habríamos puesto por delante de todos nuestros rivales. ¿No será que el patrón Menéndez quiere salir en la wikipedia?

El también asturiano Víctor Manuel compuso una “no canción” en los fantásticos ochenta a propósito de una frase que le había oído muchas veces a Tierno, al viejo profesor. Pues parafraseando a un asturiano le decimos a otro que “aquí cabemos todos o no cabe ni Dios, Sr. Menéndez”.