SIBANK LIBERBANK

06/08/2014

Beneficios de Liberbank, mayor  explotación a los trabajadores

Nosotros hoy estamos contentos porque nuestra empresa —de la que queremos seguir comiendo— ha presentado unas cuentas magníficas de la primera mitad del ejercicio 2014. Y nuestra alegría es doble, primero porque nos permite seguir pensando que vamos a conservar el empleo y también porque viene a darnos la razón sobre la situación ficticia creada ad hoc por el empresario y que los firmantes del Acuerdo de finales de 2013 se tragaron. El empresario encargó a sus abogados que fueran llorando a mesas de negociación y a tribunales, dando pena y amenazando con las penas del purgatorio a quien no quisiera pasar por las horcas caudinas.

 Tan sólo 6 meses después del “Liberbank desaparece, señoría” ¡Oh magia! las cosas ya van no sólo bien, sino viento en popa. El dichoso cierre con pérdidas de 2013, referencia preferida del empresario cuando de dar pena se trata, ha pasado a mejor gloria. Tenemos curiosidad cómo siguen llorando los abogados del empresario y de los Sindicatos firmantes en el Tribunal Supremo explicándole al estrado lo mal que va el Banco.
 

También estamos esperando ansiosos, expectantes cómo explican este cambio diametral y repentino, sobre todo los “expertos” de CCOO  y UGT que amenazaban a los trabajadores con los males de infierno para el supuesto de tener la “desgracia” de que CSICA ganara el pleito en los tribunales.
 Y es que no se conformaron con algo coyuntural. Lo firmaron hasta el año 2017 con un plazo que según la Audiencia Nacional es tan grande que, si no lo hubieran firmado nuestros sindicalistas, lo hubieran echado abajo. Está en la Sentencia. Vamos a asistir a partir de ahora al espectáculo bochornoso de ver cómo los accionistas se reparten el dinero laminado de nuestras nóminas en una ceremonia que, como ya dijimos, no es otra cosa que una alteración violenta del reparto entre las rentas del trabajo y las rentas del capital que, no olvidemos, siguen estando en lucha.
 

A aquellos sindicatos, curiosamente autodenominados de clase, que ahora vemos tan alineados con posturas neoliberales, que han cambiado la pancarta por la pluma de firmar ERTE’s, les recordamos las palabras de Warren Buffet, rico entre los ricos americanos, que reconoció recientemente que “la lucha de clases sigue existiendo, pero la mía va ganando“.
 

No debían haber caído en la trampa porque con su torpeza han destruido la calidad de vida y las expectativas de miles de trabajadores a los que dentro de poco les volverán a contar historias buscando sólo lo que les interesa de ellos: su voto para seguir firmando con los representantes de la otra clase. Los que van ganando.